sábado, 27 de noviembre de 2010

La Belle et la Bête


Le monstre se fit entendre. Un bruit effroyable, causé par le poids énorme de son corps, par le cliquetis terrible de ses écailles et par des hurlements affreux, annonça son arrivée. En voyant approcher la Bête, qu'elle ne put envisager sans frémir en elle-même, la Belle avança d'un pas ferme, et d'un air modeste salua fort respectueusement la Bête. Cette demarche plut au monstre et, se retournant vers la Belle, il lui dit: "Bonsoir la Belle".
-Gabrielle de Villeneuve.

Algo así como: El monstruo se hizo escuchar. Un ruido espantoso causado por el peso enorme de su cuerpo, el horrible tintineo de sus escamas y horribles aullidos, anunciaron su llegada. Viendo acercarse a la Bestia, a la que no pudo ver sin estremecerse, la Bella avanzó con paso firme y modestamente saludó muy respetuosamente a la Bestia. Esto le gustó al monstruo y volviéndose hacia la Bella le dijo: "Buenas tardes Bella".
-Gabriela de Villanueva.

En mis inocentes años infantiles, la caricatura La Bella y la Bestia (EUA, 1991) era de mis favoritas.

A mis veinte y tantos le entro a la lectura de la fuente original. ¡Qué espanto! En general a Disney se le acusa de simplificar (para mal) las historias originales pero en este caso hay que decir que le hizo un favor. La novela es simplemente insoportable. La premisa es esencialmente la misma. Sin embargo, el libro da la sensación de que Bella acepta finalmente casarse con la Bestia gracias a los generosos regalos que le hace esta última a la familia de Bella. Nada de salvarle la vida, regalarle la biblioteca y pasar momentos mágicos juntos (como en la peli). Muy lejos de eso. En el libro, a fuerza de regalos y de sueños extraños, Bella se convence de que debe casarse con la Bestia. Cuando finalmente sucede, llegan al castillo un hada y la madre de la Bestia (que después de dormir con Bella se convierte en el principe que era). La madre, al enterarse de que Bella es hija de un pobre comerciante, se indigna y se niega a que su hijo se case con ella. ¡Qué barbaridad! Enseguida, el hada cuenta una historia muy sacada de la manga en la que resulta que Bella es hija de un hada y un rey de un lejano país. En resumen: Bella empieza siendo un carismático aunque superficial personaje para convertirse después en una princesa digna del reino al que aspira. Mira qué casualidad... En otro momento, el que se suponía que era el padre de Bella vuelve a aparecer y después de colmar de besos a su hija, el hada le pide que se detenga y que corrija su actitud pues ahora está frente a una heredera de un reino. ¡Mmm, que la chingada!

Por mucho me gusta más la idea de una Bella apasionada de las lecturas de castillos, de príncipes, de reinos lejanos; una Bella motivada por su gran imaginación y su anhelo de vivir aventuras, de atreverse a buscar algo más, una mujer que no encuentra su lugar ahí donde está. Es mucho más convincente que Bella, con ese espíritu noble, sea atraída por una Bestia que salva su vida, que se entrega al encuentro y que se expone tal como es (por ejemplo, la escena en la que cenan juntos).

Aunque empecé la lectura del cuento original con muchas ganas, debo decir que lo terminé por pura disciplina. Sin duda alguna me quedo con la versión de Disney.

Sabina Berman: Más íntimo que hacer el amor es leer.

Por lo tanto: cuando uno ve de lejos a una señorita leyendo un libro, no se acerque: la señorita está con una orgía entre las sienes.

Sabina Berman, ensayo.

¡Primo!

Hay un teórico de números que vive en mi. Para alimentarlo, hace unos días empecé a leer el clásico An introduction to the theory of numbers de G. H. Hardy y E. M. Wright. El pretexto perfecto para lanzarme a la aventura de leer esta obra (que, en principio, no tiene mucho que ver con mis matemáticas actuales) fue, nuevamente, aprender francés. La edición que tengo en mi diminuta habitación es una traducción de François Sauvageot y me está enseñando a decir número primo, máximo común divisor o congruencia.

Desde las primeras páginas el libro me resulta revelador. Respecto al viejo asunto de la sucesión de los números primos, los autores afirman que la repartición media de los primos es bastante regular, su densidad decrece lenta y regularmente. Ilustran su afirmación con los siguientes ejemplos:

1) Entre los primeros cinco bloques de 1000 números hay 168, 135, 127, 120 y 119 números primos respectivamente.
2) En los últimos cinco bloques de 1000 números inferiores a 10,000,000 hay 62, 58, 67, 64 y 53 números primos respectivamente.
3) Los últimos 53 primos de 2) se reparten en paquetes de 5, 4, 7, 4, 6, 3, 6, 4, 5, 9 elementos en cada una de las diez centenas de los últimos mil.

Entonces el problema con la repartición de los primos es más bien un problema "local", es decir, la repartición local de los primos es muy irregular. Basta recordar nuestros curso básico de Teoría de Números para ver que dos primos pueden estar tan cerca (p primo, p+2 primo) o tan alejados uno de otro como se quiera.

Interesante asunto el de los primos. Seguiré con la lectura mientras me termino mi deliciosa Heineken.

Otro color en Tu Lus

viernes, 12 de noviembre de 2010

Otoño y graffiti en Tu Lus

Un día más en Tu Lus.


Las hojas caen, el panorama cambia.


Camino a casa, una oportunidad para sentarse y disfrutar.


Un color, otro color.


Un poco más...


¡Despierta!

sábado, 6 de noviembre de 2010

Memory of a free night

Otro sábado en mi diminuta habitación. Hoy no he salido mas que para comprar la comida de la semana, generalmente lo hacía los domingos pero aquí no trabajan los domingos. Ahora mismo debe estar celebrándose la fiesta de día de muertos que organizó la comunidad de mexicanos en Tu Lus. No quise ir. Preferí encerrarme, beber cerveza, leer a Tintin, escuchar a David Bowie y escribir aquí. Así es, en los momentos de soledad e indiferencia sigo el cliché del borracho que escribe (en mis audífonos suena Memory of a free festival, David Bowie es un maestro). Hoy no quise estudiar matemáticas. Hoy no quise salir a caminar y recorrer calles ahora familiares pero aún ajenas. Simplemente no quiero. Quiero disfrutar de esa lenta sensación relajante que invade el cuerpo cuando uno le va metiendo una cerveza tras otra. Y quiero hacerlo solo. Algunos se escandalizan con la idea pero una buena borrachera solo y con buena música es algo que hay que hacer de vez en cuando. Se vale, disfrutarse en silencio, dejar todo prejuicio para después y, por un momento, respirar por el único hecho de poder hacerlo. Acabo de recordar que hace rato hice mi primera contribución a Wikipedia: ayer fui a ver Hors-la-loi (2010), peli francesa-argelina-italiana-belga sobre la guerra de independencia de Argelia. Chingona. La cosa es que en cuanto pude busqué en la red información sobre la historia de Argelia y en el artículo Guerra de Independencia de Argelia de Wikipedia hay una sección con filmografía sobre este suceso histórico y no estaba la peli en cuestión. Así que abrí una cuenta y la agregué. Y fue así como sucedió. ¿Prueba irrefutable de un ocio recalcitrante (¡cuántas r!)? ¡No me importa! Uy, el lado oscuro... (o ¿helado oscuro?). Ya me cansé. Voy a cenar, ver una peli y a dormir. Aún tengo media cerveza a mi lado y otra esperando en el congelador. ¡Ah, mis fieles cervezas!

Je dirais même plus: Les aventures de Tintin.

Con ustedes, Tintin y su inseparable Milou.


Buscando textos en francés para principiantes, me encuentro en la biblioteca de la universidad con una pequeña colección de comics disponible para sus estudiantes. Y en primera plana, Les aventures de Tintin. Lo hojeo un poco y viendo que es bastante accesible me lo llevo a casa. Hasta ahora he leído tres números: Tintin au congo, Les cigares du pharaon y Le lotus bleu. Es un libro para niños así que hay que entrarle desde esa perspectiva. En estos tres números la estructura es más o menos la misma: Tintin y su perro Milou se lanzan a una aventura en donde tendrán que sortear peligro tras peligro hasta descubrir alguna banda criminal y acabar con sus fechorías. Bastante entretenidas las aventuras de estos personajes, aunque tal vez tenga razón el Profesor Gafapasta cuando escribe sobre Tintin:

Es posible leer y releer a Tintín cuando se le ha querido en la infancia, época llena de fulgores y maravillas, pero Tintín no convence a nadie si uno lo conoce siendo adulto. Como los Reyes Magos, Tintín es un símbolo sin fecha de caducidad en un alma bendecida por la nostalgia y el embeleso de los años infantiles, pero mal tema de persuasión resulta ser intentar convencer de sus virtudes a adultos que no tuvieron la dicha de creer en Tintín o en los Reyes Magos cuando les tocaba.


Puede ser... Como sea, seguiré leyendo a Tintin hasta acabarme los números que tiene la biblioteca. Al final, se cumple el objetivo original de enseñarme francés: 

Tonnerre!