sábado, 30 de noviembre de 2013

Un tren nos llevó a Cordes-sur-Ciel


Agosto 2012

Francia tiene algo más que París. Pequeños pueblos mágicos repartidos por aquí y por allá. Buena parte de mi vida he sido norteño. Ahora me tocó el sur. Y en este sur está Cordes- sur-Ciel. Un pueblito allá en la cima de una montaña. Las calles suben y suben. Y, de  regreso, bajan y bajan.

La cima

Suben y suben

Los tres

Un tren nos llevó a Alemania IV

Julio 2012

Lübeck

Y ya para terminar, Lübeck. Pues nada, es que estaba cerca de Hamburgo. Como en todo el viaje, la gente fue excepcionalmente amable.



Con todo y la lluvia que siempre estuvo presente, vivimos una Alemania sonriente.

Un tren nos llevó a Alemania III

Julio 2012 

Hamburgo 

Hamburgo pudo haber sido un error. Pero la buena suerte estaba con nosotros... 

¡Carnaval! 

 

¡Fiesta!

 

¡A seguir bebiendo! 


¡Y todos entregados a la pachanga!


Bueno, casi todos...


Un tren nos llevó a Alemania II

Julio 2012

Berlín

Su historia reciente.

Edificios del este

Erase una vez un muro...

 
Un poco de tensión

Give peace a chance?

La puerta

Un poco de arte alemán.

¡Otto!

El Berliner
 
La alternativa

Un tren nos llevó a Alemania I

Julio 2012

Munich

El recorrido empezó en Munich. Después de aquellos días en la montaña volví a los brazos de mi mujer (y ella a los brazos de su hombre) y nos entregamos a los excesos (¡a todos los excesos!).


Nos encontramos en Munich para beber. Y Munich fue generoso. Tarros gigantescos estuvieron siempre junto a nosotros. Y con ellos, los munichienses. La primer noche, unos jovencitos peligrosos que a mí me divirtieron mucho pero que asustaron a mi mujercita dejaron claro que hay alemanes que están lejos de ser como los platican.


Una calle después: bar lleno de gente, un acercamiento tímido, una pregunta: are you part of the community?, una respuesta: somehow..., ¡esa era la palabra mágica!, resultado: ¡harta cerveza gratis!, hasta que la fiesta terminó y nos echaron del lugar. A caminar de vuelta a casa siguiendo un camino zigzigueante. Minutos después, una fuente que promete la eterna juventud. La princesa Malèna y yo, en la cúspide de la borrachera, atrevesamos la fuente corriendo y ¡ah, borrachera traicionera!, mi triste compañera terminó estampándose en un pilar de medio metro de altura. Como pude la levanté imaginando lo peor: ¡el alcohol y una fuente mágica se iban a robar la memoria de mi mujercita! La abracé completamente angustiado, le pregunté su nombre y si sabía dónde estaba. No contestó. La noche se fue en un largo mal viaje que mi oscura imaginación decidió seguir.

A la mañana siguiente, la cruda y de vuelta a la vida real. ¡Y vámonos a Berlín!

jueves, 28 de noviembre de 2013

¡Ya se armó!

Bueno, tanta chinga finalmente concluyó en algo. Desde el viernes 15 de noviembre de 2013 hay un nuevo doctor en matemáticas en el mundo.


¡¡¡ A güevo !!!